Con la entrada en vigor del nuevo Reglamento Europeo de Protección de Datos, aparecen algunas novedades de obligado cumplimiento. Una de ellas es la nueva figura del delegado de protección de datos. Teniendo en cuenta que el Reglamento está en ese periodo transitorio de dos años para que todas las empresas y organismos de la UE lo pongan en práctica, es importante comprender qué novedades habrá que ir implementando para evitar futuras sanciones.
Cabe destacar que este nuevo Reglamento deroga la directiva europea de 1995 en materia de protección de datos. Además, es de obligado cumplimiento para todas las empresas, organizaciones y organismos públicos de la Unión Europea. De hecho, no es necesario que a nivel nacional se redacte una Ley para ponerlo en marcha, puesto que no se trata de una directiva.
En los artículos 37 a 39 de este nuevo Reglamento Europeo de Protección de Datos se detalla la incorporación de la figura del Delegado de protección de datos. Pero, ¿sabemos realmente cuáles son sus funciones?
Las funciones del delegado de protección de datos
El delegado de protección de datos o DPO (por sus siglas en inglés) debe de estar especializado en derecho de protección de datos y estará por encima del responsable de tratamiento y el encargado de tratamiento de los datos. Sus funciones son variadas y muy importantes:
- Asesoramiento a los encargados del tratamiento de los datos personales sobre sus obligaciones ante el nuevo Reglamento, así como las que se devienen de la normativa nacional.
- En el caso de que los datos que se manejan sean de alto riesgo, deberá de realizar un estudio de impacto, asesorando a los responsables sobre cada cuestión. Además, tendrá que comprobar su cumplimiento.
- Labores de supervisión a todos los niveles para cerciorarse de que se está poniendo en práctica el nuevo Reglamento Europeo en Protección de Datos (tanto en organismos públicos como en empresas privadas).
- Funcionará como nexo de unión entre los organismos público y empresas con la Agencia de Protección de Datos.
Además, el delegado de protección de datos podrá ser requerido por los titulares de los datos personales para solventar cualquier duda al respecto del tratamiento de sus datos.
¿Es obligatorio contar con esta figura?
La respuesta es “sí”. El delegado de protección de datos es una nueva figura que debe constar, de forma obligatoria, en todos los organismos públicos. Además, las empresas que se dediquen al tratamiento de datos masivo también tendrán que incorporar a un delegado en su organigrama.
Por otra parte, pese a que el Reglamento recomienda incorporar esta nueva figura a todas las empresas, no es obligatorio para aquellas PYMEs y otros organismos que su actividad principal no conlleve un tratamiento de datos personales que requieran un nivel de protección alto.
Nombramiento del delegado
Es importante tener en cuenta que no es necesario que cada empresa u organización cuente con un delegado de protección de datos independiente. De hecho, las administraciones públicas pueden tener un mismo delegado para diversos organismos. Lo mismo ocurre con los grupos empresariales. Además, aquellos organismos que representen a diferentes empresas tendrán la potestad de nombrar a un delegado para todas ellas.
Obviamente, el delegado de protección de datos puede formar parte o no de la plantilla del negocio. Aunque es importante que la independencia de esta figura esté totalmente garantizada y no podrá ser destituido de su cargo por motivos que atañan al desempeño de su labor.